El Real Jardín Botánico, CSIC, invitó ayer a los y a las amantes de la escritura a emular a Ortega y Gasset, Juan Ramón Jiménez o Eugenio D’Ors para celebrar el Día del Libro.
La historia original del primer, y hasta ahora único, Silencio por Mallarmé se remonta al 11 de septiembre de 1923 cuando el escritor mexicano Alfonso Reyes reunió a un grupo de amigos en el Real Jardín Botánico de Madrid con la excusa de homenajear a Stéphane Mallarmé, el poeta del silencio. Ortega y Gasset, Antonio Marichalar, Eugeni D’Ors, José Bergamín, Enrique Díez-Canedo, Mauricio Bacarisse, José Moreno Villa y Juan Ramón Jiménez acudieron a la cita y siguieron las instrucciones de Reyes: sentarse durante cinco minutos en algún lugar del Botánico y, a continuación, escribir qué habían pensado durante ese tiempo. Bautizaron el encuentro como El silencio por Mallarmé (Una encuesta sin trascendencia) y, aunque pocos dedicaron sus pensamientos al poeta francés durante esos minutos, publicaron sus textos breves sobre el silencio, la reflexión y la escritura en el número 5 de la Revista de Occidente.
Ochenta y seis años después, y con el mismo objetivo de reivindicar silencio, reflexión y escritura coincidiendo con la celebración del Día del Libro, el Real Jardín Botánico recuperó esta iniciativa abierta a todo el público. Los asistentes pudieron disfrutar del recogimiento del Botánico para reflexionar durante esos cinco minutos de silencio y escribir a continuación sus textos, que serán publicados en la página web http://www.silenciopormallarme.org/.
La historia original del primer, y hasta ahora único, Silencio por Mallarmé se remonta al 11 de septiembre de 1923 cuando el escritor mexicano Alfonso Reyes reunió a un grupo de amigos en el Real Jardín Botánico de Madrid con la excusa de homenajear a Stéphane Mallarmé, el poeta del silencio. Ortega y Gasset, Antonio Marichalar, Eugeni D’Ors, José Bergamín, Enrique Díez-Canedo, Mauricio Bacarisse, José Moreno Villa y Juan Ramón Jiménez acudieron a la cita y siguieron las instrucciones de Reyes: sentarse durante cinco minutos en algún lugar del Botánico y, a continuación, escribir qué habían pensado durante ese tiempo. Bautizaron el encuentro como El silencio por Mallarmé (Una encuesta sin trascendencia) y, aunque pocos dedicaron sus pensamientos al poeta francés durante esos minutos, publicaron sus textos breves sobre el silencio, la reflexión y la escritura en el número 5 de la Revista de Occidente.
Ochenta y seis años después, y con el mismo objetivo de reivindicar silencio, reflexión y escritura coincidiendo con la celebración del Día del Libro, el Real Jardín Botánico recuperó esta iniciativa abierta a todo el público. Los asistentes pudieron disfrutar del recogimiento del Botánico para reflexionar durante esos cinco minutos de silencio y escribir a continuación sus textos, que serán publicados en la página web http://www.silenciopormallarme.org/.
No hay comentarios:
Publicar un comentario