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jueves, 26 de abril de 2012

Siameses

Todo el mundo, y en especial nuestro país se ha quedado con la boca abierta al comprobar que ninguno de los dos mejores equipos del mundo va a jugar la final de la Champions. El martes le tocó al Barça acostarse con los ojos llenos de lágrimas al haber sido incapaz de romper el muro londinense del Chelsea, que aguantó con un jugador menos desde el minuto 30. Para más inri, Torres dio la puntilla, ese Torres que no mete un gol al arco iris pero que los caprichos del destino le hacen marcar con asiduidad contra el Barça.
Anoche fue el turno del Real Madrid. Después de ponerse todo de cara en 15 minutos, algo parecido a lo que le sucedió al Barça la noche antes, no supo dominar a un Bayern que manejó el partido a su antojo tras marcar el penalty absurdo que cometió Pepe. Tras prórroga, se llegó a los lanzamientos desde los once metros. Y la lotería, que no lo es tanto, cayó a favor de los bávaros. En los penalties se ve quién tiene sangre fría y quién no. Una cosa es que uno esté convencido en lanzar, como afirmaba anoche Ramos, diciendo que volvería a lanzar en una situación similar, y otra cosa es anotar. Lanzar puede hacerlo cualquiera, marcar no. Observé a Cristiano durante la prórroga, sus gestos, su expresión facial, y se pasó toda la segunda parte de ésta pensando en ese penalty que lanzaría minutos después. Algo parecido a lo que le sucedió en la final de Champions que jugó con el United y donde erró también su lanzamiento. Luego está Kaká, que visto lo visto en el tiempo que jugó, se le notaba excesivamente acelerado y presionado. La presión podía jugarle una mala pasada en su lanzamiento y así fue; no había que ser muy adivino para intuirlo. De Ramos qué decir. Alguien que no tiene clase, que no se ha visto en una así jamás, que lo de la sangre fría con él no va, decide lanzar uno (probablemente porque otros compañeros no quisieron, aunque a mí me da en la nariz que no van por ahí los tiros). Y el balón a Munich. Y lo más patético es que se queda mirando al punto de penalty como dando a entender que la irregularidad del terreno es la causante de su error. Por eso digo que por ahí no van los tiros. Creo que su deseo de ser protagonista tiene más la culpa. A los alemanes también les pesó la responsabilidad. Kroos, un cañonero, lanzó despacio, despacio. Y Lahm, el capitán, quiso inventar y jugar a ver quién aguanta más, y Casillas detuvo su lanzamiento casi de pie. Creo recordar que Lahm ya ha fallado algún que otro penalty en este tipo de tandas.
En fin, que una cura de humildad para los dos superequipos, que están condenados a ir de la mano. El Clásico, el desgaste físico y mental que hubo en él, ha sido el gran culpable de sus eliminaciones. El Barça porque tenía que ganar sí o sí después de perder la Liga; los culés empezaron a perder el partido del Chelsea el sábado. Por mucho que se defiendan argumentando que fueron fieles a su estilo, el Barça sólo tiró una vez a puerta en la segunda mitad. Y el Real porque tenía una oportunidad de oro al saber que su máximo rival estaba ya fuera; los merengues lo hicieron el martes por la noche. Si apuro, como comenté la semana pasada, el Madrid perdió la eliminatoria en el Allianz, cuando el superentrenador decidió que el 1-1 era un buen resultado. No supo ver que el Bayern estaba muerto y resucitó, como ayer; tras el 2-0 supo reponerse y dominar. La bestia negra apareció de nuevo, quizá porque tanto invocar al espíritu Juanito fue contraproducente. Si no me equivoco, Juanito perdió más que ganó contra el Bayern.

domingo, 22 de abril de 2012

Dos visiones de una misma cosa

Para mi sorpresa, no se está dando demasiado bombo a la jugada polémica del primer gol. Dudosa es, y para muestra, las dos percepciones.

La madridista. No hay fuera de juego porque el pie de Adriano habilita a Khedira.

La barcelonista. Sí hay fuera de juego porque el alemán está ligeramente adelantado.
Todo depende del ángulo desde el que se mire.

sábado, 21 de abril de 2012

Vuelta a la tortilla

Por fin Mourinho ha ganado en el Camp Nou y, con ello, se asegura la liga 2011-2012. ¿Cambio de tendencia? A saber. Yo personalmente creo que no, aunque también pensaba que este partido iba a ser para el Barça y no ha sido así. Hubo pista el miércoles en Stamford Bridge, pero no pensé que la derrota afectase a los chicos de Pep. No hace ni una hora que el partido ha terminado y parece que el gran culpable de la derrota culé es Guardiola por presentar una alineación "atípica", cuando siempre se ha destacado por incluir sorpresas en sus onces.
El Clásico ha tenido los tintes de casi siempre: dominio blaugrana y contragolpe merengue. Pero ha habido cosas diferentes: Messi, Iniesta y Xavi desaparecidos y Cristiano apareciendo por una vez en una cita importante. Tampoco ha habido acciones broncas y el árbitro no ha expulsado a nadie. Mou estará contento con el arbitraje, ya que el primer gol blanco ha sido en fuera de juego, eso sí, en una jugada confusa. Al final, 1-2.
El Barça no ha encontrado espacios, y sólo ha tenido, aparte del gol, la ocasión clara de Xavi en la primera mitad y la de Tello en la segunda. El Madrid, por su parte, sólo ha tenido los dos goles. El de Khedira, insisto, en fuera de juego. Pero no hay que quitar el mérito al despliegue físico de los blancos, empezando desde arriba con Benzema, Özil y Cristiano. Atrás han estado consistentes, destacado Coentrao, y han impedido las combinaciones rápidas del Barça.
Ahora es tiempo de golpes en el pecho de los forofos merengues y lágrimas blaugranas exculpatorias de Guardiola. Y en dos días la Champions. Unos y otros pueden desperdiciar o superar lo acontecido en este enésimo Clásico. Eso sí, los blancos con la Liga en el morral.

miércoles, 18 de abril de 2012

Quien con fuego juega...

Sin duda, José Mourinho es uno de los mejores entrenadores del mundo; incluso para muchos es el mejor sin discusión, cuestión debatible y de preferencias. Pero lo que está claro es que el portugués no es infalible. Es más, suele cometer numerosos errores, errores que tiende a repetir. Ayer, en el partido del Allianz Arena volvió a recaer en uno de sus defectos, el de especular, el de ser "amarrategui". Mourinho había puesto como misión a sus chicos marcar un gol. Lo hicieron y, visto lo visto, con eso bastó. Mourinho volvió a especular con el resultado y terminó pagándolo. Ya ha sufrido experiencias parecidas no hace mucho (Málaga y Villarreal), y el año pasado en esta misma ronda de semifinales de Champions contra el Barça (parecía valerle el 0-0 en el Bernabéu y todo se fue abajo con la rigurosa expulsión de Pepe; al final, 0-2). Con todo y con eso, Mou no ha aprendido la lección.
El partido de ayer lo planteó el luso con el once con el que está afrontando los partidos importantes este año (con Coentrao por Marcelo y Benzema por Higuaín). El teñido portugués es el que cuenta con más detractores en el universo merengue (los 30 millones de euros que costó tienen gran parte de culpa). Mou emplea a su compatriota porque es más defensivo que Marcelo, y ayer tenía un hueso que roer: Robben. El luso cumplió hasta que en el minuto 90 fue a por uvas con Lahm y permitió un centro lateral que supuso el 2-1 de Gómez. Fallo reprochable, sí, pero igual es el fallo de los centrales por permitir que llegue un balón raso al área pequeña y el delantero rival lo remate; incluso el que está a punto de llegar a despejar es Arbeloa, el otro lateral.
El Madrid jugó mal, en buena parte debido a la colocación de varias piezas clave. Özil empezó en una banda y Di María en la posición de enganche. Error garrafal, porque ni uno ni otro desarrollan su juego en esas posiciones. Es más, las dos ocasiones claras que generó el Madrid en la primera parte fueron pases del alemán a Benzema desde el centro. Cuando en la segunda parte Özil jugó en su sitio, el Madrid dominó y empató. Y aquí viene el erre que erre especulativo de Mou: minuto 69 y el alemán sale para dar entrada a Marcelo, justo en el momento que Özil dominaba el partido a su antojo y se encontraba cómodo combinando con Cristiano y Benzema. De ahí en adelante, el Madrid ni la olió y dio pie al Bayern a retomar el control del partido. Porque el Bayern, es evidente, es inferior a los blancos. Tiene mucho físico y mucha constancia, con sólo Ribery, qué pedazo de jugador, y Robben poniendo el impulso ofensivo, pues Gómez está muy desasistido arriba. Con todo y con eso cazó una y otra se le escapó por los pelos. O sea, que el Bayern consiguió hacerle dos goles al Madrid jugando a la alemana, con balones a la olla. Lugar donde sufre el Madrid de veras.
La vuelta se decidirá en Chamartín y lo que está claro es que si Mou especula se va a llevar un disgusto. A priori, un 2-1 no es mal resultado para el Madrid, pero todo dependerá de lo que quiera hacer el propio equipo blanco.
Para acabar, quisiera volver a destacar algo que ya he comentado en diferentes post futboleros de este blog. Cristiano no suele aparecer en las grandes citas (sólo le recuerdo el gol de la final de Copa del año pasado); ya le sucedió en Manchester, con Portugal y ahora con el Madrid. Lo de ayer se lo voy a disculpar pues tuvo que jugar con botas prestadas ya que le robaron sus tres pares de botas en el vestuario. Parece una tontería, pero el que ha hecho deporte sabe que el utillaje de uno es algo muy personal, y si no se está cómodo no se rinde igual. Que le pregunten a Nadal si podría jugar bien cambiándole alguna de las manías que tiene. Los deportistas suelen ser maniáticos, y con el calzado mucho más. ¿Qué nos pasa a todos/as cuando nos ponemos unos zapatos por primera vez?
Pero lo que no tiene nombre es lo de Di María. Es un pollo sin cabeza egoísta. No pasa cuando tiene que hacerlo, cuando lo hace lo hace de manera defectuosa, no chuta cuando debe. Vamos, que una joya desquiciante. Ayer se llevó la palma. Más aún si se le ubica en un sitio donde todavía se pierde más.
Y el sábado el Barça. Mal pinta el asunto. El consuelo es que aún le llevarán un punto de ventaja a los de Guardiola.

jueves, 26 de enero de 2012

Jueves de reflexión

Hoy, 26 de enero de 2012, es un día para reflexionar en algunos de los campos que el autor de este blog trata de analizar cuando el tiempo, las ganas y las noticias se lo permiten.
La noticia política (jurídica) del día, sin duda, es la "no culpabilidad" de Camps y Costa que un jurado Popular (destaco la P de Popular) ha dictaminado en referencia al "juicio de los trajes".

El jurado considera que no hay pruebas inculpatorias, y que la relación de Camps con "su amigo del alma" (ese del que ha dicho durante el juicio que no le conocía cuando las conversaciones telefónicas grabadas demuestran todo lo contrario) es solo comercial. ¿Le sorprende a alguien el veredicto? A mí no. Éste es fiel reflejo de lo que pasa en Valencia desde hace años. La sabiduría del pueblo lleva otorgando en las urnas la mayoría absoluta a un señor que ha endeudado a su comunidad hasta finales del siglo XXXIII, que está detrás de la financiación ilegal del partido en la región, que ha pagado tropecientos millones de euros por vocetos y maquetas, etc.; es decir, que lo de los trajes es pecata minuta. Lo triste es que se le haya juzgado exclusivamente por esto. Más alucinante es que hasta el propio Camps estuviera a punto de declararse culpable en su momento, como hicieron dos de sus acólitos en junio. Por cierto, qué va a pasar ahora con ellos. ¿Esto es sabiduría Popular (vuelvo a remarcar la P)? Por descontado. Y la valenciana, lo es más. Ahora nos queda aguantar la rasgadura de vestiduras de los inculpados y de De Cospedal, pidiendo justicia por la restitución del nombre mancillado del expresidente. Solo nos falta que el estado tenga que indemnizarle. Que no me extrañaría según viene Gallardón ejerciendo de ministro de Justicia.
Ésta es otra. El ex edil de la capital viene dando fuerte cacareando que va a modificar algunas leyes y la composición del Tribunal Supremo. Y yo me pregunto, ¿va a agilizar los trámites o va a seguir siendo esto una peregrinación en el desierto de 40 años cada vez que uno se vea inmerso en un proceso? Mucho cambiar leyes a su gusto (ganaron las elecciones y les toca ahora legislar de forma retrógrada y ajustarlas a su ideología), pero de los problemas de funcionamiento y de eternizarse en los juzgados, nada de nada. Eso va a seguir igual. Y respecto a esto, ¿no se está dedicando el Gobierno a asuntos que no tienen importancia, como pregonaban las firmas y voces de la caverna cuando ZP hablaba, por ejemplo, de ETA, de Memoria Histórica, de aborto, de las nucleares... ya que para ellos la economía era la única cosa importante que existía, al menos hasta las elecciones? ¿Ésta ya no es tan importante, y más cuando los nubarrones que asoman en este país que iba a ser salvado por los descendientes del Cid son más negros que los cojones de un grillo? Me enervo con la hipocresía.
En este jueves tampoco puede faltar la crónica deportiva. Anoche se disputó un nuevo (y enésimo) Clásico. Desarrollo distinto, mismo final. La lectura es simple, el Madrid jugando al ataque (es evidente que Ötzil debe estar en el once esté bien o esté mal) puede hacerle pupa al Barça, pero que lo consiga es otra cosa. Ayer la suerte acompañó a los culés, el peor Barça desde hace muchísimo tiempo, y pasaron la eliminatoria. La cuestión añadida es por qué a pesar de ser el peor Barça, éste no pierde contra el mejor Madrid.

Yo sigo insitiendo en mi teoría freudiana de que el Madrid debería pedirle a los culés que vistan con el segundo uniforme, pues el blaugrana les cortocircuita (ayer menos). Anoche hasta los hados se cortocircuitaron y no fueron justos con los merengues. Pero fútbol es fútbol.
Y por último está el basket. El agorero de este perfil griego lleva vaticinando lo que sucedió anoche en el Palacio de los Deportes desde la pretemporada. Un equipo serio funde a uno que no lo es, que no tiene un director de juego en condiciones, que solo sabe correr contra medianías, que no se ha enfrentado a ningún equipo potente a igualdad de condiciones. Así: derrota por 19 puntos en casa, que condena al equipo a la más que probable segunda posición en el grupo (está por ver si lo consigue) y enfrentarse en el cruce de cuartos contra CSKA de Moscú con desventaja de campo.
El epitafio está esculpido en la losa antes de que el cadáver yazca bajo ella: un nuevo año sin Final Four.

lunes, 12 de diciembre de 2011

Los pies en la tierra

No hay duda de cuál es el mejor equipo de fútbol del momento, por mucho que algunos periodistas quieran vender otras cosas mediante cortinas de humo. La realidad es la que es. El sábado, el Barça demostró que está un peldaño por encima del Madrid. Fue fiel a su estilo, y eso que se intuye que el equipo no está pasando su mejor momento. Aún así, le vale ante un equipo que se cortocircuita cuando tiene delante la samarreta blaugrana (¿por qué le pasó lo mismo contra el Levante? Misterios freudianos). Los hados hicieron que Benzema marcase a los 23 segundos. Pero el Barça siguió a lo suyo, y con un poquito empató. Incluso siguió cediendo pelotas para que Valdés las jugase con el pie pese a su cantada en el gol madridista. En la primera parte ni se vio a Xavi, ni a Iniesta, ni a Álves, y mucho menos a Cesc. Al Barça le sirvió Alexis y dos carreras de Messi, y con eso se marchó al vestuario con un empate. En el Madrid sólo destacaron Benzema, Lass y Ötzil, sacando varias contras que se difuminaron rápido debido al nerviosismo de los estiletes merengues. Di María no da la talla, es un pollo sin cabeza; Cristiano tuvo el 2-0 (y luego el 2-2), pero es el ejemplo claro del cortocircuito blanco y no embocó ninguna; al igual que los dos centrales (Ramos-Pepe), que hasta lo que se llevaba de temporada parecían la mejor pareja del mundo; el sábado se caían, despejaban al patadón, hacían faltas a destiempo, vamos, que eran unos flanes. Algo así como Casillas, que está visto que lo suyo con el pie lo ha dejado pendiente para su próxima vida. Marcelo, por su parte, no pasó del medio del campo y Xabi Alonso estuvo desaparecido. Luego vino el afortunado 1-2, y se terminó el asunto con la puntilla del 1-3 en una contra de muchos quilates. Lo demás, paseo culé ante un Madrid que ni la olió en cuanto se marchó Ötzil (con el 1-2).
Esta vez no hay excusas arbitrales para Mou ni para el madridismo. Personalmente creo que el Barça se comió al Madrid más que en el 2-6 o el 5-0. Fue superior a nivel mental, que no de juego (sólo a partir del 1-3). Y eso es lo rotundo y evidente. Por suerte para los blancos, están con los mismos puntos y si ganan al Sevilla serán tres por encima. Tendrán que intentar crear un colchón para ir al Nou Camp con holgura, porque allí son fijos los tres puntos para los culés. Cosa es que en este tiempo vayan todos al psicoanalista para que les quite la fobia al blaugrana.
Luego está lo del baloncesto. Ayer Estudiantes le endosó un 90-85 a los merengues. ¡Un equipo hecho para correr y anotar y le endosan 90 puntos! Diecisiete puntos de ventaja en el primer cuarto se esfumaron en un visto y no visto. Se han marchado los dos ÑBA y primera derrota ante un equipo inferior; sí, inferior, por mucho que los del Ramiro ayer hiciesen el mejor partido de lo que va de temporada. Las carencias blancas en el Palacio fueron las exhibidas hasta ahora: pivots (Tomic y Begic) blandos en rebote aunque con chispazos de ambos en ataque, falta de dirección de juego en estático, sufrimiento cuando no se corre, jugadores de paseo (Rodríguez, Suárez, Reyes), y a tu mejor baza en ataque (Carroll) olvidada en los momentos clave, al igual que un desdibujado Mirotic, que sólo destacó en el rebote. Tirón de orejas a Laso, que tendrá que espabilar y meter a Singlair cuanto antes en la dinámica de juego.

lunes, 25 de julio de 2011

La Celeste, campeona de América


Para la final sí se cumplieron los pronósticos, y Uruguay ganó la Copa América 2011 con comodidad. Y Forlán, el asistente hasta ahora, apareció y marcó dos goles. Los atléticos le esperan con ganas... ¿y al Kun?

¿Qué tienen en la cabeza algunos futbolistas?

Eso me pregunto muchas veces. ¿La gran cantidad de dinero que ganan les hace consumir sus neuronas?
La última de uno de ellos. No tiene otra ocurrencia el futbolista del Valencia Ever Banega que posar junto a sus hermanos vestido con la camiseta del Real Madrid. Y encima va y cuelga la foto en su facebook, tuenti, o lo que sea. Para que la vea todo el mundo. Sí, señor. Sin tapujos.
Y es que el perla ya había tenido antes sus más y sus menos en esto de flirtear para mal con las nuevas tecnologías (colgó un vídeo en el que se le veía haciéndose una gayola).
De lo que estoy seguro es de que la afición ché le toleró más lo de cascársela en la red que vestirse de merengue.
Ay, cabecita loca... y hueca.


lunes, 18 de julio de 2011

Sorpresa americana


No sé si es la primera vez que sucede, pero es al menos la primera vez que tengo constancia de que en unos cuartos de final de una competición, sea del deporte que sea, ningún favorito supere su cruce y pase a semifinales. Este fin de semana ha ocurrido en la Copa América; los a priori favoritos se han visto apeados contra pronóstico antes de tiempo. Colombia, que parecía esta vez una alternativa a la sempiterna dupla de favoritos (Brasil-Argentina), cayó en la prórroga 0-2 contra Perú. Uruguay rememoró el Maracanazo con un Argentinazo, y despachó a los anfitriones en la tanda de penalties. A Brasil le ha sucedido otro tanto de lo mismo contra Paraguay; para más inri, los cariocas no consiguieron anotarle ningún penalty al portero guaraní. Y por último, la selección "vinotinto" venezolana ha despachado a los chilenos, metiéndose por vez primera en semifinales.
¿Quién se pone ahora la etiqueta de favorito?

domingo, 19 de junio de 2011

Cuando lo divino vale para ganar


Ésta es la portada del diario Olé del sábado en referencia a la situación que vive River Plate, que se juega la promoción de descenso por primera vez en 110 años de historia. Simplemente genial.

jueves, 28 de abril de 2011

Jugar con fuego lleva a quemarte

Por fin queda poco para que acabe este maratón de Clásicos. Se terminará este rollo que acapara telediarios y portadas de periódicos, y la gente de a pie (en especial los que no somos ni de uno ni de otro equipo) podrá respirar tranquila, de momento.


Bueno, lo primero que deja este tercer Clásico es que el cuarto sobra. Un 0-2 es insalvable en el Nou Camp para cualquier equipo, incluso para un Real Madrid dirigido por el "gurú" Mourinho. Que no le extrañe a nadie que salga con alguna de las suyas para la vuelta. Un Madrid B, por ejemplo. Y no sólo por las bajas.


Luego están los retratos de cada protagonista, y vamos por partes.


  • Mourinho. Por la boca muere el pez. Su lengua viperina es la posible causante de lo acontecido en cuanto al arbitraje de Stark. Lo peor es que una jugada puntual, por muy rigurosa que sea, no puede condenar el devenir de una eliminatoria de semifinales con dos equipos de la categoría del Barça y Real. Sí, sé que la estrategia "desenchufa-Barça" giraba en torno a la posición de Pepe, y por eso me parece más triste aún. Que todo un Madrid dependa de Pepe... Ustedes mismos saquen conclusiones. Los blancos han presentado tres caras en los últimos tres choques con los blaugranas. Una ultradefensiva, la del partido de liga, la de contener la acometida culé en su propio campo sin apenas crear peligro. Sólo a raíz de la expulsión de Albiol y con el marcador en contra, los blancos se estiraron y jugaron mejor, con un Ötzl activo y dinámico. El Barça dio por bueno el empate y sanseacabó. Una segunda cara, la de la Copa, con dos caras a su vez: la de apretar en la primera parte en campo blaugrana y ahogar al Barça para que éste no crease ninguna ocasión de peligro, y generar los merengues, a su vez, tres-cuatro claras; y la cara de la segunda parte donde se pareció más al primer encuentro, quizá por falta de fuelle, donde el Barça fue dominador aunque quedó cortocircuitado en los últimos cinco minutos del tiempo reglamentario y en la prórroga. Y la tercera, la de ayer, similar a la del partido de liga pero con un Barça con menos chispa y peligro, aunque claramente superior, que no significa que crease ocasiones. El Madrid de ayer fue el menos peligroso de los tres, se mostró agotado desde el principio y pareció servirle el 0-0 al que estaba condenado el partido si no hubiese llegado la expulsión de Pepe. No se entiende este pobrísimo bagaje teniendo en el banquillo a tres delanteros más o menos en forma: Higuaín, Benzema y Adebayor. Cuando un entrenador depende tanto de los resultados y éstos no se dan, queda en bragas.


  • Guardiola. En esta semana ha quedado retratado. Es el niño bueno al que le salen los colmillos de vampiro cuando las cosas vienen mal dadas. Tira la piedra y esconde la mano. He de reconocer que siempre he sido anti Guardiola, incluso cuando era jugador. A mí no me ha engañado y sus declaraciones no me sorprenden, aunque éstas formen parte de la guerra abierta que hay entre él y el portugués. Imagino que a mucha gente neutral le habrá decepcionado; a sus seguidores para nada. Como el juego le ha salido bien, ahora guardará silencio para quedar como un caballero. Hipócrita. Ha aprendido la lección de su mentor Cruyff, el Mourinho de su época y que de vez en cuando nos obsequia con una perla. En cuanto su planteamiento, ha sabido compensar el juego de presión blanca. Primero, tácticamente. La clave está en Keita, sí, ese que estuvo calentando toda la segunda parte y la prórroga en Valencia y al que Guardiola no le dio bola en un ataque de entrenador. Rectificar es de sabios. Luego está el otro juego, el que dominaba el Madrid hasta ayer. Dado que la posibilidad de que los blancos se quedasen con diez había sido factible en los encuentros anteriores debido a su exceso de revoluciones, ayer el Barça trató de provocar la expulsión desde el comienzo. ¿Estrategia predeterminada? Busquets, Pedrito, Álves y Pinto interpretaron bien sus papeles. Los dos primeros simulando agresiones en la cara; el brasileño haciendo de él mismo; y Pinto, buscando al amonestado en el túnel de vestuarios para tratar de montar una tangana. Finalmente fue el "microondas" de Pepe el que cayó en una de las trampas, quizá la menos preparada. Ahí terminó todo: los blancos agacharon la cabeza y empezaron a rezar y los culés se frotaron las manos aliviados. La eliminatoria estaba decidida.


  • Messi. El crack surgió cuando el enemigo estaba herido de muerte. Olió sangre y dio el golpe de gracia. Hasta ese momento había estado impedido por el entramado defensivo blanco. Volvió a mostrarse como el más desequilibrante del mundo.


  • Pepe. Menos duro que otras veces pero impecable en su tarea destructiva. Sus pocas luces se apagaron del todo con la entrada a Álves. Discutida expulsión, sí. Posible también. Que el escenario no era para merecedora de roja, indiscutible. Pero eso es otra cosa. ¿Cuántas idas de cabeza del portugués van ya? ¿Hasta cuándo se le consentirá?


  • Cristiano. Individualista, obsesionado, con la puntería desviada. Y ahora critica la táctica de su entrenador. ¿Habrá castigo? Ja. Qué cosas tengo.


  • Arbeloa. Rey del juego subterráneo con sus choques y pisotones. ¿Tanto le ha cambiado Mourinho?


  • Albiol. No vale para un equipo de primera categoría. Ya advertí que la baja de Carvalho le costaría cara a los blancos y no me equivoqué. Los dos goles de Messi vienen por falta de concentración del valenciano, al igual que su expulsión en el partido de liga cuando tenía ganada la posición a Villa. Ayer no cubrió el primer palo en el centro de Afellay y tampoco fue capaz de tirar a Messi en su eslalon antes de que la "pulga" entrara en el área. ¿Alguien duda de que Carvalho lo hubiese hecho?


  • Ötzl. Sufre sin balón y no se le ve. El tipo de juego de contención no es para él; se mata a correr para nada. Inédito en los dos partidos como titular. En liga, cuando fue suplente y se quedó el Madrid con diez, fue donde mostró su mejor juego.


  • Puyol. Básico. Jugó de lateral izquierdo pero transmitió seguridad a la zaga culé. Ha sido el partido donde menos ha sufrido ésta. Su ausencia en Copa, clave.


  • Busquets. El teatrero sin sanción. Lo hace también en liga contra rivales inferiores. Impecable en defensa; con el balón es más torpe, todo lo que manda hacia adelante lo pierde si es a más de cinco metros. Es el Bakero de ahora.


  • Álves. Ni hablo de él. Como futbolista es un espectáculo, como persona... Ya en el Sevilla era así, pero ahora se ha encrudecido.


  • Stark. ¿Tiene nivel para un partido así? Perdonó tarjetas a Ramos, Messi, Álves, y luego tiene el colofón con la roja a Pepe. ¿Pedirá la camiseta al argentino?


  • Barcelonismo. Que tengan miedo de perder su hegemonía con este equipazo me parece ridículo. Pero siempre tienen una ayudita extra. ¿La necesitan? Visto lo visto...


  • Madridismo. Tiene excusa a la que agarrarse. Pero la imagen, el juego... ¿Es suficiente la Copa contra el Barça? Parece que sí. Pues entonces se contentan con poco, muy poco.
  • jueves, 21 de abril de 2011

    El triunfo de Mourinho



    Hacía 19 años que el Real Madrid no ganaba la Copa del Rey, y anoche lo volvió a hacer. Aunque quien ganó el trofeo no fue el club blanco, fue su entrenador, se me entienda.



    Mourinho, entrenador de títulos, como él mismo se ha calificado después de aceptar el reto de responder a unas palabras de Cruyff, ha conseguido cambiar la historia del club blanco, su filosofía. A Mourinho no le importa jugar como un equipo pequeño, ser dominado por el rival y salir a la contra para ver si saca algo, con tal de conseguir su objetivo. Con esa estrategia adaptativa contra el F.C. Barcelona, filosofía si profundizamos, le ha arrebatado la Copa al todopoderoso Barça, pero también le ha arrebatado su historia al club que representa. ¿Eso importa cuando se gana? Parece que no. El resultado es la consigna a seguir. El partido del sábado trajo críticas por el juego, pero el 1-1 contentó, en definitiva, a los blancos porque no salieron escaldados.


    Si el Barça acierta y golea, incluso si simplemente pasa la eliminatoria de Champions, ¿se tomarán medidas en el seno blanco o la conquista de la Copa compensa este empequecimiento?


    Es cierto que Mourinho es un fenomenal estratega. Ha desarbolado al Barça en ciertos tramos del partido (la primera parte fue sin duda merengue con ningún tiro a puerta blaugrana y con dos claras ocasiones madridistas); y aunque los culés dominaron la segunda parte, se vio que sus hombres clave: Xavi e Iniesta, no estuvieron finos. Sólo Messi generó peligro, ya que Villa, sobre todo, y Pedro, tampoco participaron en demasía. Incluso con un poquito del argentino pudieron ganar si Casillas no hubiese sacado un par de guantes.


    La prórroga se igualó y ahí Guardiola sufrió ataque de entrenador. ¿Cómo que quitó a Villa, su "9", para meter a Keita, que llevaba calentando desde el inicio de la segunda mitad? Si el mediocampo carecía de fuerza, y eso que el Madrid bajó muchísimo en esa segunda parte e incluso pareció otro equipo, ¿por qué no introdujo a Keita antes? Ni la entrada de Afellay ni la del marfileño aportó nada. Mourinho se comió a Guardiola en la prórroga y su equipo marcó primero y pudo sentenciar después.


    En definitiva, uno se adapta al rival, aunque sea para parecer un Compostela -se me entienda-, y el otro erre que erra aunque no funcione todo lo de antes. Las lecturas son diversas. ¿Vale todo para conseguir un resultado?

    miércoles, 20 de abril de 2011

    Calentando la Copa (de España)

    Ayer, José Vicente Hernáez, redactor del diario Marca, publicó lo acontecido en el túnel de vestuarios del Bernabéu a la finalización del partido de liga entre los eternos rivales. El protagonista indiscutible no fue otro que Gerard Piqué. En el partido de ida ya tuvieron los jugadores sus más y sus menos sobre el césped a raíz de una entrada salvaje de Ramos a Messi y en la que Puyol recibió un manotazo en la cara, y cómo no, el central catalán estuvo en el ajo. Con respecto a esto ya hice un análisis en su momento.


    Ni estoy a favor ni en contra de las opiniones soberanistas que pueda defender este caballero waka-waka, pero creo que es una hipocresía lo suyo tan grande como la Sagrada Familia (serem patris aquesta vegada). Si el señorito se siente catalán que no juegue en la selección española y listo. Es tan sencillo como eso, y así se acabarían los conflictos con sus compañeros de selección más identificados con la causa españolista (léase Sergio Ramos y Casillas). Recuerdo a Nacho, lateral izquierdo del Compostela, que en época de Clemente como seleccionador dejó muy claro, ante su más que posible convocatoria con el combinado nacional (incluso, no sé si llegó a ser convocado), que él se sentía gallego y no español, y que no aceptaría defender los colores de la rojigualda. Olé sus cojones y su ética. Nacho no fue a la selección y punto y pelota, perdiendo así una oportunidad de subir su caché deportivo y su cuenta corriente. Sin embargo, lo de jugar Piqué con la selección española tiene un objetivo claro, pues esto supone un importante incentivo a nivel económico, deportivo y publicitario. El caballero waka-waka menta la política por lo bajini cuando hay pasta de por medio y cierra el pico cuando acude con la selección nacional. ¿És això ser hipòcrita o no? Del Bosque debería tomar cartas en el asunto y vetar al caballero waka-waka en la selección, si no, tendrá problemas de vestuario a la larga, y más si la hegemonía del Barça continúa, pues Piqué seguirá crecido.


    El caso de Piqué no es un precedente; Del Horno, Yeste, Sergio García, Iríbar en su momento, ya ejercieron su nacionalismo pero al mismo tiempo su hipocresía al acudir a las convocatorias (en el caso del portero no le quedaba otra). Pero, ¿no es parte de culpa también de quien los convoca?


    jueves, 17 de febrero de 2011

    Bárbaro, Diego

    Viendo este vídeo de Diego de partidos en el Calcio me vienen a la cabeza dos cosas: primera, ¿cuándo han ido a cazar así a Messi o a Cristiano? Y segunda, ¿el gol a los ingleses no parece más fácil?

    martes, 30 de noviembre de 2010

    La otra lectura del Barça-Madrid

    El partido de ayer en el Nou Camp puede tener muchas interpretaciones y lecturas, desde la puramente deportiva, pasando por la política y la filosófica; pero yo me voy a detener en la psicológica, en un aspecto puntual del choque donde arreciaron los resentimientos.

    Recapitulo: al final del partido, Ramos le sacude por detrás un patadón a Messi; Puyol, Piqué y Xavi, que salta desde el banquillo, se lo recriminan con vehemencia y se monta una tangana en la que el sevillano le da un manotazo en la cara a Puyol. Mientras Ramos se retira al vestuario entre la melé de jugadores y miembros de ambos cuerpos técnicos, Piqué y él mantienen un enfrentamiento verbal subido de tono en el que Casillas media apartando al catalán con reproches.

    Y aquí viene la lectura psicológica de la que hablaba. Es evidente que Ramos pagó su impotencia y frustración en el partido con Messi, pero también es evidente que su enfrentamiento con los jugadores catalanes del Barça, compañeros suyos en la selección, se debió a que algo estaba enquistado entre ellos. ¿Alguien recuerda lo que sucedió en octubre con Piqué en una rueda de prensa cuando un periodista le pidió que contestase en catalán? El cabreo del sevillano fue de aúpa. Pues ustedes mismos; lo de la bronca de ayer no sólo se debía a motivos deportivos, sino que los sentimientos patrios de cada uno afloraron a la mínima (si a un 5-0 se lo puede tachar de mínima). Quizá todos analicen esto como un calentón propio de una situación deportiva humillante, pero creo que el asunto va más allá. Y más con las elecciones catalanas tan calentitas. El nacionalismo de los jugadores de la selección nacional, tanto de los catalanes como del sevillano españolista, mostró su rostro y provocó un enfrentamiento entre ellos, y no precisamente deportivo. Si no, ¿dónde estaba Álves, que es el más follonero de los blaugranas? ¿Y Cristiano, Pepe o Carvalho, que son especialistas en meterse en jaleos? ¿Y Xabi Alonso, que parecía una madre? La foto que reproduzco entre estas líneas es bastante significativa: sólo falta Valdés de los catalanes.
    Si vamos más allá, ¿qué consecuencias tendrá esto en el grupo de Del Bosque?

    lunes, 19 de julio de 2010

    España, campeona del mundo

    Después de una semana de resaca, en la que hemos digerido que la selección española ha conseguido el título de campeón del mundo en Suráfrica (unos y unas aún no se lo creen), es hora de análisis y valoraciones.

    No hay duda que la selección de Del Bosque ha sido la mejor del campeonato. El salmantino recibió la herencia del "Zapatones" sin variar apenas el grupo, término que ahora parece haberse puesto de moda en esto del deporte. Un equipo de fútbol ya no se entrena, se gestiona como si sus integrantes fuesen miembros de una empresa; el coaching, la psicología, el scouting, la dietética, etc., cualquier variable se controla al dedillo. Pues bien, Del Bosque ha tenido la suerte de dirigir a la mejor selección española de la Historia. La calidad que pueden atesorar los Xavi, Iniesta, Alonso, Villa, Piqué... no se había concentrado en la historia de la selección jamás. Había habido jugadores de clase en las diferentes etapas, tipos de la talla de Di Stéfano, Kubala, Puskas, Gento, Luis Suárez, Lapetra, Pirri, Zoco, Del Sol, el propio Del Bosque, Maceda, Gordillo, Señor, Sarabia, Butragueño, Michel, Guardiola, Caminero... pero nunca se había dado una conjunción de éstos. Lo que había sucedido hasta ahora es que la clase se veía arropada por la brega, por la "furia"; en el grupo de Del Bosque sucede al revés: la brega (Capdevila, Puyol, Busquets, Ramos) se encuentra dentro de un conjunto especializado en el tiki-taka, al que amasar el balón le encanta. En definitiva, nadie domina la posesión del esférico mejor que los españoles.

    Si a este estilo bien coordinado y aprendido le añadimos que el resto de selecciones no está en su mejor momento, y que la suerte ha sido benefactora en esta ocasión, el resultado es el que se ha conseguido: España campeona. Porque vamos a ser serios, el único equipo que ha jugado un poco al fútbol aparte de los nuestros han sido los alemanes (con Otzl y Schwensteiger como timoneles), que con poquito casi nos la lían (el fallo de Kroos ante Casillas pudo decantar el partido para los teutones). Los demás favoritos han sido de chiste: Italia y Francia fuera a las primeras de cambio; Inglaterra clasificada por los pelos como segunda de grupo y eliminada de forma humillante por Alemania en octavos; Brasil jugando a la italiana y ganando con lo mínimo hasta que Holanda le devolvió la moneda del 94 en cuartos; Argentina haciendo lo justo fue sorprendida por el contraataque alemán también en cuartos; y Holanda demostrando en la final lo que podía dar de sí -poco-, y que aun y con eso, Robben les pudo adelantar en el marcador, aunque según se desarrolló el partido el fruto finalmente hubiese caído de maduro y la final se hubiese decantado de parte nuestra. Simplemente hay que ver que Uruguay ha llegado a semifinales sólo con Forlán (Luis Suárez ha estado bastante apagado y su aporte más destacado fue la mano salvadora ante Ghana en el último minuto de la prórroga).

    Lo que está claro es que para ser campeón del mundo tienen que conjuntarse una serie de factores: juego (lo tenemos), suerte (Casillas y el penalty parado a Paraguay, claves; más los claros errores de los delanteros -Kroos, Robben-), arbitraje a favor (pese a los palos de los oranje, se quedó sin señalar la posible expulsión de Puyol por ser el último hombre en otro mano a mano de Robben; o la no repetición del penalty paraguayo cuando se aprecia cómo entran varios jugadores españoles en el área antes de que Cardozo pateara el balón -compensado al no señalar el hecho a Cesc en el rechace de Justo Villar-; el gol de Villa contra Portugal en fuera de juego por los pelos), y el mal momento de los rivales (léase lo anteriormente escrito). Y a España le ha pasado por una vez. Esperemos que el ciclo continúe para la Eurocopa de Polonia. Por edad, el grupo continuará casi intacto; el estilo seguirá siendo el mismo mientras sus aplicadores jueguen; y los rivales (excepto Alemania) no tienen visos de mejorar. El futuro sigue siendo esperanzador. Que dure.

    martes, 15 de junio de 2010

    El PSG de Luis Fernández



    Viendo a la selección de Camerún he comprobado que el entrenador es Paul Le Guen, el mítico centrocampista del PSG que se proclamó campeón de la Recopa en el año 96. El año antes jugaban con ellos un tal George Weah (fichado por el Milán), Ginola (Tottenham), Ricardo Gomes (central de la selección brasileña), Valdo (Benfica) y Cobos (RCD Espanyol).
    El PSG se convirtió en la "bestia negra" de merengues (Recopa de 1994, donde los parisinos caerían en semifinales con el Arsenal, a la postre campeón), y culés (Copa de Europa de 1995, eliminados también en semis por el Milán). Al año siguiente conquistarían su primer título europeo contra el Rapid de Viena. La alineación de la final fue:
    • Portero: Lama
    • Defensas: Bravo, N´Gotty, Roche y Fournier
    • Centrocampistas: Guerin, Le Guen, Colleter y Djorkaeff
    • Delanteros: Raí y Loko

    El panameño Dely Valdés entraría después a lo largo del encuentro.


    jueves, 10 de junio de 2010

    Gracias, Dios, por el fútbol, por Maradona

    Mañana empieza el Mundial. Como aperitivo: el segundo gol de Maradona a los ingleses en el Mundial de Méjico 86. La narración de Victor Hugo Morales es tan grande como el mismo gol.

    jueves, 13 de mayo de 2010

    Sufriendo hasta el final


    Siendo fiel al guión con el que fue escrito, el Atleti consiguió ganar su segundo título europeo a falta de tres minutos para llegar a la tanda de penalties. Era mejor que el Fulham, pareció demostrarlo por momentos; y, en otros tantos, se vio superado por los londinenses. Este equipo es así. O todo o nada. Felicidades, colchoneros.

    jueves, 22 de abril de 2010

    Qué malos son

    Vuelvo a mi tema estrella deportivo: qué malos son los árbitros. Dentro de esta calificación de malos incluyo también el término "estamental"; es decir, que están plegados a lo que las instituciones demanden. Porque no creo que, profesionalmente, se pueda ser tan malo. Hay jugadas demasiado claras para fallar en su interpretación. Pero jornada tras jornada, ya sea liguera, de Champions, o del campeonato municipal de Albolote, los trencillas nos sorprenden a todos con sus decisiones. Si no, que se lo pregunten al F.C. Barcelona. El arbitraje del señor Olegario Benquerença fue deplorable. Porque puede haber jugadas controvertidas (el gol de Milito lo debe anular el linier en todo caso, por cierto, el linier que señaló un fuera de juego inexistente a Milito con el 0-0 cuando se quedaba solo delante de Valdés; o el penalty a Álves, que yo no veo por ningún lado), pero la dinámica que llevó durante todo el encuentro fue la de permitir el juego bronco (que no duro) de los interistas sin castigarles no ya con amarillas sino señalando falta. La permisividad en una de estas jugadas (una falta a Messi) propicio el contraataque del 2-1. Al Barça le han pagado con la misma moneda con la que le salvaron el año pasado contra el Chelsea.
    En definitiva, por muy bueno que seas (como le pasa al Barça), si el árbitro te quita estás apañado y no tienes nada que hacer, más aún si se junta esto con el que no estés fino una noche (el Barcelona hizo uno de los peores partidos de la era Guardiola). Estos personajes del silbato dirimen el resultado final de los partidos, aunque su "brillante" actuación se limite sólo a una jugada. Luego podríamos analizar el porqué hacen estas tropelías. En el caso del Barcelona, ¿ha sido como "venganza" por lo que le sucedió al Chelsea el año pasado? ¿La UEFA no quiere que se repita el mismo campeón? ¿Miedo a que los culés invadan Madrid para la final, lo que puede generar enfrentamientos con los madridistas? Porque hay que reconocer que tontos hay en todos lados y el ambiente no sería de fiesta, sino de ley marcial. Muchas preguntas surjen, aunque al Barça todavía le queda la vuelta para arreglar el desaguisado. Una cosa que me ha sorprendido: Guardiola no ha hablado de la actuación del árbitro portugués. Algo que le honra, pero a lo mejor debería haberlo hecho: el año pasado rajó con respecto a la actuación del colegiado en el partido de ida contra el Chelsea en el Nou Camp, y en la vuelta se vio beneficiado claramente por el noruego Orevro. Debía haber tirado de hemeroteca y haber tomado nota.